HOT ACHILLE
Hot Achille LED se puede utilizar como lámpara de pared o de pie. Sin embargo, la idea poco convencional de fijar la fuente de luz a un cable que cuelga verticalmente le da una expresión completamente diferente. El cable coaxial está fijado al techo. El reflector con la fuente de luz es ajustable en altura y gira dentro de un rango de aprox. 100cm Un peso asegura que el cable permanezca lo suficientemente tenso, y la alimentación se proporciona desde abajo, por lo que no se requiere una toma de techo. El soporte curvo del cabezal de la lámpara crea una imagen gráficamente atractiva desde el exterior y al mismo tiempo asegura la fricción necesaria que fija el reflector y la fuente de luz al cable, pero también les permite moverse. con caliente Achille.
Ingo Maurer
Ingo Maurer sin duda puede decirse que es uno de los genios del diseño de nuestro tiempo. Nació en 1932 en la isla de Reichenau, lago de Constanza, Alemania. Se formó como diseñador gráfico (1954-1958) y emigró a Estados Unidos en 1960, donde trabajó como diseñador freelance durante tres años en Kayser Aluminio y en IBM. Después de ese período regresó a Munich.
Después de regresar a Alemania, Maurer comenzó a centrarse exclusivamente en nuevos conceptos en el diseño de iluminación. En 1966, Maurer abrió Diseño M, una firma especializada en la producción de diseño de iluminación de vanguardia. Durante los últimos cuarenta y tres años, Maurer ha sido uno de los diseñadores de iluminación más prolíficos, creando más de 150 luces y sistemas de iluminación. Es considerado como un pionero en el uso de las nuevas tecnologías de iluminación. Reconoce que está fascinado por las propiedades mágicas y místicas de la luz, y esto es evidente en el humor, originalidad y pura belleza de su trabajo.
El trabajo de Maurer está fuertemente influenciado por el Pop Art, un movimiento con el que se familiarizó mientras vivía en Estados Unidos, y su primer diseño de iluminación, “Bulb” (1966), tomó la forma de una bombilla enorme de metal cromado y vidrio soplado.
A lo largo de su carrera, el trabajo de Maurer ha sido presentado en numerosas exposiciones en museos de todo el mundo. Ha sido el destinatario de elogios frecuentes, y algunos de sus honores incluyen el de “Chevalier des arts et des lettres” de la ministra francesa de Cultura (1986), “Diseñador del Año 1997” de la revista alemana Architektur (1997), “Premio de Diseño 1999” de la ciudad de Munich (1999), “Lucky Strike Designer Award” por la Fundación Raymond Lowey (2000), “George Jensen Prize 2002” otorgado por el Comité del Premio Goerge Jensen (2002), y “Royal Designer of Industry” por la Royal Society of Arts (2005).
OTROS PRODUCTOS RELACIONADOS