Raquel Oliva, vicepresidenta de Oliva Iluminación, fue presentada ayer como la embajadora de la Marbella Design 2020, en el marco de la feria de FITUR que este año conmemora su 40 aniversario. En el acto, celebrado en el stand de Marbella y con la presencia de Carolina Abril, directora ejecutiva de la exhibición y de Laura de Arce, directora general de turismo, se anunciaron además, todas las novedades que este año se podrán ver en la tercera edición de la Marbella Design Fair.
Durante la presentación Raquel Oliva afirmó: “El hecho de que me hayan elegido a mí como embajadora y que piensen que yo represento su filosofía y valores es, sin duda alguna, un auténtico privilegio. A lo largo de su breve historia, la Marbella Design se ha convertido en un escaparate abierto a Europa, y al resto del mundo, donde se dan cita los profesionales y empresas del mundo de la decoración, del interiorismo, el diseño y la arquitectura, para presentar sus nuevas propuestas”.
La tercera edición de la Marbella Design 2020, que se celebrará del 3 al 12 de julio, volverá a contar con más de 40 integrantes del sector del diseño que mostrarán sus nuevos proyectos en el Palacio de Congresos y Exposiciones en un evento donde el lujo y lo exclusivo están presente. En definitiva, según Raquel Oliva: “un evento imprescindible para los diseñadores, interioristas y firmas más importantes del panorama actual, como Oliva IIuminación compañía de la que soy vicepresidenta, gracias a su propuesta innovadora, su espectacular plantel de expositores y a su apuesta por ofrecer al visitante una experiencia lo más completa posible”.
La estrecha relación entre Raquel Oliva y la Marbella Design Fair comenzó el año pasado cuando la vicepresidenta de Oliva Iluminación fue una de las invitadas de honor de la segunda edición. Además, colaboró como expositora a través de su compañía Oliva Iluminación en dos proyectos: El ‘Coral Beach’, desarrollado por el estudio Viteri para Ramos y Cabos, en el que la compañía introdujo las tendencias del momento en luminarias; y el espacio ‘Desayunando sin diamantes’ de la conocida interiorista Soledad Ordoñez, con unos empotrables de Metalarc y unos apliques de Marset para crear un juego de luces único que aportaba equilibrio entre los colores y la decoración.